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En la zona de Torre Pacheco este plato es frecuente tanto en
restaurantes como en las casas. La abundancia y variedades de melones que se
cultivan hacen que las combinaciones vayan del clásico melón piel de sapo, a la
pulpa del Galia.
La mezcla de sabores dulce y salado tienen en esta combinación una de
las más desarrolladas en el ámbito de nuestra gastronomía como uno de los
entrantes más degustados.
Además de esta presentación sencilla, se puede optar por otras
propuestas como melón con crujiente de jamón. Por su valor nutritivo y poco
calórico, forma parte de dietas que tienen como objetivo reducir calorías sin
perder las vitaminas y proteínas necesarias.
María Dolores
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