Medio kilo de fresas
Medio litro de nata para montar
Cinco hojas de gelatina neutra
Doscientos cincuenta gramos de azúcar
El zumo de medio limón
Dos yogures de fresa
Elaboración
Ponemos las hojas de gelatina a hidratar en agua fría.
Comenzamos lavando las fresas, les quitamos el rabito, las troceamos y las ponemos en un cuenco junto con el azúcar y el zumo del medio limón y lo trituramos con la batidora hasta que nos quede una crema suave.
Esta crema la ponemos a fuego moderado, cuando esté caliente disolvemos las hojas de gelatina bien escurridas y removemos hasta que se disuelva. Ahora la ponemos en un recipiente hasta que esté tibia.
Montamos la nata, le añadimos el yogur y lo batimos hasta que nos quede bien integrado.
Por último echamos el puré de fresas ya frío sobre la mezcla de nata montada y yogur y volvemos a batirlo todo junto hasta que quede bien uniforme.
Lo echamos en un molde, untado con mantequilla, de aro desmontable y dejamos que se enfríe en la nevera unas seis horas mínimo. Una vez desmoldada podemos decorar al gusto. Yo utilicé un baño de mermelada de fresa y unos adornos de nata montada.
María Dolores
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