Ingredientes
Un lomo de salmón de dos kilos de la parte anterior
Trescientos gramos de azúcar
Seiscientos gramos de sal
Dos cucharadas de pimienta negra
Dos cucharadas de eneldo picado y hojas
Un lomo de salmón de dos kilos de la parte anterior
Trescientos gramos de azúcar
Seiscientos gramos de sal
Dos cucharadas de pimienta negra
Dos cucharadas de eneldo picado y hojas
Elaboración
Limpiamos el salmón de grasa y espinas que hayan quedado.
Lo espolvoreamos con el eneldo y una cucharada de pimienta blanca molida.
Mezclamos el azúcar, la sal y la pimienta blanca
que nos queda. Limpiamos el salmón de grasa y espinas que hayan quedado.
Lo espolvoreamos con el eneldo y una cucharada de pimienta blanca molida.
En una fuente honda colocamos la mitad de la mezcla de sal y encima los lomos con la piel hacia abajo y volvemos a cubrirla con la mezcla sobrante. Encima le ponemos una tablilla y peso encima y los metemos en la nevera tres días. Una vez transcurridos, sacamos el salmón de la sal y lo lavamos bajo el grifo para quitarle toda la sal, lo secamos y lo envolvemos con papel film.
Dejamos en el refrigerador el que vayamos a consumir enseguida y el resto lo metemos al congelador.
Cuando queramos consumir más lo sacamos del congelador y lo ponemos en el refrigerador la noche antes, para descongelarlo.
Lo podemos cortar con un cuchillo bien afilado al bies, para hacer filetitos finos, para servirlo con un chorrito de aceite.
Hay muchas formas de consumir el salmón marinado, con salsa agridulce, en tostadas con queso fundido, en ensaladas variadas etc.
María Dolores
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