Seis huevos
Doscientos cincuenta gramos de harina
Doscientos cincuenta mililitros de leche
Un vaso de aceite
Un sobre y medio de levadura en polvo
Azúcar
Elaboración
En un recipiente ponemos a calentar el aceite y la leche. Cuando comience a hervir añadimos la harina y removemos procurando que no hierva de nuevo. Retiramos del fuego. Añadimos los huevos previamente batidos y la levadura. Mezclamos bien.
Untamos una bandeja con aceite y vamos colocando los roscos ya moldeados a mano. Horneamos a 180º con el horno previamente calentado durante una media hora. Hacemos un almíbar con azúcar y agua en el que bañamos rápidamente los roscos una vez horneados (meter y sacar). Finalmente los espolvoreamos con azúcar.
En un recipiente ponemos a calentar el aceite y la leche. Cuando comience a hervir añadimos la harina y removemos procurando que no hierva de nuevo. Retiramos del fuego. Añadimos los huevos previamente batidos y la levadura. Mezclamos bien.
Untamos una bandeja con aceite y vamos colocando los roscos ya moldeados a mano. Horneamos a 180º con el horno previamente calentado durante una media hora. Hacemos un almíbar con azúcar y agua en el que bañamos rápidamente los roscos una vez horneados (meter y sacar). Finalmente los espolvoreamos con azúcar.
Consejo
Si queremos tenemos la opción de partirlos transversalmente y rellenarlos de crema, mermelada, nata, como si fueran profiteroles.
María DoloresSi queremos tenemos la opción de partirlos transversalmente y rellenarlos de crema, mermelada, nata, como si fueran profiteroles.
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